Talleres y capacitaciones para jóvenes rurales en sede central de IICA
Nicol Camacho es la joven uruguaya que fue seleccionada entre sus pares para participar de esta invitación que realizó el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) a visitar su sede central de Costa Rica

A su regreso conversamos con Nicol, esta joven rural que vive y trabaja en el medio rural, tiene un emprendimiento de ovinos junto a su familia en un predio en la zona rural del departamento de San José. Participa hace dos años en el ámbito nacional de la REAF (Reunión Especializada para la Agricultura Familiar- Mercosur) y en la Comisión Honoraria de las Juventudes Rurales, ambos espacios de intercambio y trabajo conjunto entre sociedad civil en este caso desde el sector de juventud, con las instituciones de gobierno, para el desarrollo y mejoramiento de las políticas públicas para la agricultura familiar y el desarrollo rural.
Nos contó sobre esta experiencia que “nos llegó la invitación del IICA al espacio de jóvenes, y tuvimos instancias de zoom para decidir quién iría, y votamos”. La invitación del instituto era para ir los días 12 y 13 de agosto, a su sede central en Costa Rica, y participar de unas instancias “donde realizamos los dos días capacitaciones relacionadas a emprendimientos, digitalización, economía, servicios financieros, entre otros”. Nos comentó que como representante del país “llevamos las brechas que tenemos acá (en Uruguay) la juventud rural como el acceso a tierra y a créditos financieros” son los temas más relevantes, y que vio, se comparten en muchos casos con sus pares de los otros países.
Participaron jóvenes de 22 países de América Latina, nos contó y para los talleres los dividían por regiones. “Nos tocó juntos a Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, y teníamos en general las mismas dificultades, en Chile también se le agrega el problema de acceso al agua”. Un dato curioso es, que, si bien en la mayoría de estos países el límite de edad para caracterizarse como joven es hasta los 29 años, en Chile por ejemplo el límite es de 40 años.
Esta además de una experiencia enriquecedora desde lo profesional y laboral y de aportes para traer a sus pares y espacios donde interactúa como joven rural, también fue una experiencia personal muy especial “era mi primera salida de Uruguay y mi primer viaje en avión…todo fue medio loco, tuve que hacer escalas y tuvo un incidente pequeño, pero todo salió bien, fue muy linda la experiencia”. Nos contó que pudo recorrer un poco, además de participar en las actividades.
Destaca que puede evaluar que, si bien Uruguay tiene algunas dificultades a mejorar aún, pudo ver que otros países tienen por ejemplo dificultades para acceder a capacitaciones por internet, algo que para nosotros es hoy bastante común que suceda de manera accesible.
Nicol tiene previsto preparar un informe para compartir con sus compañeras y compañeros del espacio de jóvenes donde participa, aunque dice le dará un poco de trabajo ya que “traje mucha información que procesar”, y nos dice, que quedaron redes de intercambio con otros jóvenes que participaron y que quieren seguir conectados y compartiendo experiencias y aprendizajes…”como de un joven chileno que quiere compartir con nosotros sobre su emprendimiento”.
Fuente: www.gub.uy/ministerio-ganaderia-agricultura-pesca