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Receta de Merengue y Punto nieve
MERENGUE Y PUNTO NIEVE
Los Merengue y Punto nieve son muy simples de preparar e ideales para meriendas o desayunos.
PREPARACION:
Muchas personas se plantean si el merengue y el punto nieve son la misma
cosa. Pues no es así Las claras a punto de nueve se logran al batir sólo la
clara con una pizca de sal, incorporándoles suficiente aire a la mezcla para
llegar a una consistencia más esponjosa. El codiciado merengue es al que se
llega incorporando el azúcar que lo endulzará y será el detalle perfecto
para los tus postres.
Una pizca de sal
La esponjosidad de la mezcla se logra mejor si al poco tiempo de comenzar a
batir agregar una pizca de sal. Este sencillo detalle hará una gran
diferencia en la consistencia de tus claras a punto de nieve.
INGREDIENTES:
Cuando eliges batir con varillas
Primero, si decides hacer este blanco trabajo con la batidora, trata de
batir antes las claras con un tenedor y dejarlas un poco esponjosas antes de
poner a andar las varillas. En este caso deberás hacer los movimiento
circulares de abajo hacia arriba y no en horizontal, de esta forma se agrega
aún mas aire a la preparación. Es aquí cuando va esa pequeña pizca de sal.
Huevos separados el día anterior
Mañana es el día del rico postre en casa que merece ser condecorado con una
capa de claras a punto de nieve, pues bien, hoy es el día para tomar los
huevos que vas a utilizar, separarlos, y guardar en un recipiente sellado en
el refrigerador. La calidad de tu batido será aún mejor.
Momento de incorporar azúcar
Si decides agregar azúcar a las claras, y transformarlo todo en un delicioso
merengue, ésta la debes agregar luego de haber agregado la sal y dejar
incorporar en el batido, en el momento en que el volumen de la preparación
haya subido bastante. Luego de agregar el azúcar sigue batiendo para que
todo quede más firme e incorporado.
Cómo saber que ya están listas
Cuando las claras pasan las etapas del batido, notarás que al levantar el
tenedor o las varillas de tu batidora las puntas están más duras. Ahora, si
das vuelta el cuenco notarás que la en la cocina también hay kilos de magia
pues la mezcla no se cae. ¡Felicidades! Ya terminaste con las claras a punto
de nieve.
RECETA: MERENGUE Y PUNTO NIEVE